Comités

El Comité Consultivo Internacional es el máximo órgano responsable de asesorar a la UNESCO sobre la planificación y ejecución del Programa Memoria del Mundo en su conjunto. Está integrado por 14 miembros que participan a título personal, nombrados por el Director General de la UNESCO considerando su autoridad en el ámbito de la salvaguardia del patrimonio documental.

Las principales funciones del Comité son:

- Definir la visión general de la política y la estrategia del Programa.
- Supervisar sus avances a nivel mundial.
- Mantener actualizadas las Directrices Generales del Programa Memoria del Mundo.
- Aprobar las incorporaciones o las eliminaciones del Registro Internacional de la Memoria del Mundo.

El Comité cuenta con diversos subcomités que apoyan su operación en áreas específicas. Para llevar a cabo la coordinación del Programa en su conjunto, el Comité examina los informes de sus subcomités y de los comités regionales y, a su vez, asesora a esos órganos sobre sus funciones y responsabilidades.

El Director General de la UNESCO convoca al Comité Consultivo Internacional a una sesión ordinaria cada dos años en la que también participan los presidentes de los subcomités.

Los comités regionales de Memoria del Mundo son estructuras de cooperación que reúnen a personas de dos o más países alrededor de los objetivos del Programa. La agrupación puede estar basada geográficamente, en culturas o intereses compartidos, o en torno a oficinas regionales de la UNESCO.

Los comités regionales permiten abordar cuestiones que quedan fuera del ámbito práctico tanto del Comité Consultivo Internacional como de los comités nacionales individuales. Idealmente, pueden contar entre sus miembros con representantes de los comités nacionales de la región correspondiente. Los comités nacionales son invitados, pero no obligados, a participar en un comité regional pertinente.

Las funciones de los comités regionales variarán según las necesidades, pero pueden incluir:

Mantener un registro internacional regional de la Memoria del Mundo.
Nominar grupos de patrimonio documental para los registros regionales o internacionales que crucen las fronteras nacionales o que de otro modo es poco probable que se propongan.
Fomentar la cooperación y la capacitación en la región.
Impulsar la gestión de proyectos dentro de la región.
Procurar apoyo para los países de la región que no tienen comités nacionales.
Fomentar la creación de comités nacionales y la orientación de los comités.
Promover la coordinación de la publicidad y la sensibilización en toda la región.

Actualmente existen tres comités regionales en funcionamiento:

MOWCAP: el Comité de la Memoria del Mundo para Asia y el Pacífico, que se creó en 1998 y que abarca la región de Asia y el Pacífico.
MOWLAC: el Comité Regional memoria del mundo para América Latina y el Caribe.
ARCMOW: el Comité Regional de la Memoria del Mundo para África.

Los comités nacionales del Programa Memoria del Mundo son entidades autónomas con sus propios términos de referencia y sus propias reglas de membresía y sucesión, dentro de la estructura y la visión general del Programa. Como requisito principal para pertenecer a él y tener derecho a utilizar el nombre y el logotipo de Memoria del Mundo, deben estar acreditados por la Comisión Nacional de la UNESCO del país en que opera, y se espera que cumplan las siguientes funciones básicas:

• Presentar o apoyar candidaturas para el registro internacional, regional y nacional.

• Establecer y actualizar de manera permanente el registro nacional de Memoria del Mundo.

• Fomentar la publicidad, la promoción y la sensibilización en relación con el Programa y sus objetivos y actividades.

• Tener vínculo operacional y un apoyo probado con su Comisión Nacional para la UNESCO y su comité regional memoria del mundo (si lo hubiera).

• Contar con una composición que refleje el carácter geográfico y cultural del país, los grupos culturales importantes y los conocimientos y la experiencia pertinentes.

• Adoptar un mandato y normas escritas de su funcionamiento, incluidas las bases de pertenencia y relevo.

• Poseer capacidad para desempeñar su función (esto puede incluir financiación y apoyo, vínculos con los principales archivos, bibliotecas o museos, vínculos con el gobierno).

• Disponer de un mecanismo de rendición de cuentas (respecto a los objetivos del Programa, a los criterios de selección del registro y a la presentación periódica de informes).

Los registros nacionales enumeran el patrimonio documental de la nación aprobado para su inclusión por el comité nacional de memoria del mundo o, cuando no existe comité nacional, la comisión nacional correspondiente de la UNESCO. Ayudan a que los gobiernos y las instituciones conozcan el patrimonio documental en poder de diversos tipos de organizaciones e individuos privados, y la necesidad de estrategias coordinadas para garantizar la protección del patrimonio en peligro de extinción de la nación.